Cerezo Blanco de Provenza:

Es conocido por sus frutas de color amarillo cremoso que ofrecen un sabor dulce y jugoso. Esta variedad se destaca por sus flores blancas en primavera, creando un atractivo ornamental en el jardín. Es especialmente apreciado para el consumo fresco.

El Cerezo Burlat:

Es famoso por ser una de las primeras variedades en madurar en la temporada. Sus cerezas son de color rojo brillante, grandes y sabrosas. Con un sabor dulce y una pulpa jugosa, el Burlat es ideal para comer directamente del árbol o para usar en diversas preparaciones culinarias.

El Cerezo Guindo:

Es apreciado por sus frutas de color rojo oscuro y sabor ácido característico. Estas cerezas son comúnmente utilizadas en la producción de mermeladas, jarabes y licores debido a su perfil de sabor único. Este árbol también ofrece un hermoso espectáculo de flores blancas en la primavera.

El Cerezo Picota:

Conocido por sus cerezas que se desprenden fácilmente del pedúnculo, dejando un hueco en la base, lo que le da su nombre. Estas cerezas son de color rojo oscuro y tienen un sabor dulce y jugoso. La maduración suele ocurrir en torno a junio y julio, proporcionando una deliciosa cosecha de verano.